Luego
de vivir hasta los diez años en el tinglado del fondo,junto al
gallinero,su abuela se hartò de que le matara las gallinas a
mordiscones,comièndose los menudos y los huevos y la vendiò a un
gitano que cirujeaba por el barrio.El gitano vièndola muy delgada
para su gusto,volviò a venderla a un turco que poseìa un corralòn
de materiales.Cuando el turco notò que los bifes y el asado
desaparecian crudos de la heladera se apresurò a vendèrsela a la
gorda LA
Lamuerte
que andaba en el negocio de las pendejas.
-Es
un poco chica pero crecerà en seguida,ademàs come muy bien-fueron
los argumentos comerciales del turco.
La
gorda la bañò,le sobò un poco el cuerpo buscando ausentes
redondeces y le diò una modesta paliza,a fin de ir disciplinàndola
por anticipado.La dieta fuè por varios meses muy abundante.
-Tenès
que ponerte bien putita,muchas proteìnas,me oìste tenès que comer
muchas proteìnas-
Cuando
descubriò que mordisqueaba los pollos y los churrascos antes de ser
cocinados le diò la primera buena paliza con el cinto,atada a la
silla de mimbre para que no se moviera.
A
la dieta de engorde,la gorda agregò unas hormonas recetadas por el
Dr.Tumba,el encargado de los certificados de defunciòn truchos del
barrio.Sea por este tratamiento dietètico-hormonal o porque habìa
cumplido los doce años,se convirtiò en una fragante y lozana,aunque
niña,jovencita.Llegò entonces la hora que el marido de la gorda
Lamuerte,el flaco Paco la iniciara.Todo fuè bien y la gorda se tomò
una noche extensa en explicarle cuales eran las caracteristicas del
negocio y los temas generales acerca de lo femenino,cual si de una
verdadera madre se tratara.Mejor que la suya que habia muerto en el
manicomio donde estaba recluìda por intentar ahogarla con
insecticida cuando era bebè.
Todo
anduvo bien,hasta que surgieron los primeros problemas.Algunos
clientes se quejaban.
-No
lo sabe hacer bien,muerde-
La
gorda pensò que tendrìa que delegar en el flaco Paco,un poco mas de
enseñanza en ese aspecto.El siguiente problema fuè que el flaco se
aficionò demasiado a la muchacha,dejando de lado a la gorda.
Un
par de palizas no solucionaron la cosa.
Por
otra parte aparecieron conflictos en la novel pareja pedagògica.
El
querìa mucho ciertas cosas,era un poco brusco y jodia demasiado con
la cebada de mate con bombilla de cuero.Fuè entonces que Mariela,tal
era el nombre de la Comegente,probò lo que serìa su delicatessen en
adelante.Una tarde enojada con Paco,le arrancò un pedazo de
miembro,ingirièndolo sin mas,bañado en la abundante sangre que manò
de la herida.
Luego
de la huìda de la casa se dedicò al negocio como trabajo
habitual.Vivìa en trenes,ya que era menor para alquilar un
hotel.Comprò ropa barata y provocadora,una mochilita y asì
andaba.Cada tanto,cuando era seguro para ella,gozaba de su
delicatessen.Tuvo miedo al principio,antes de descubrir que su
gastronomìa favorita era tambièn un arma poderosa e intimidante.
Asi
pudo desembarazarse de varios tratantes que intentaron
secuestrarla,comièndoles el corazòn luego de destriparlos,maniobra
que efectuaba cada tanto.
Mariela
tuvo una fugaz carrera de dos años.Poco a poco fuè
descontrolàndose,devoraba gente en hoteles por hora,baños de
estaciòn,gasolineras y llegò a hacerlo en la via pùblica,lo que
permitiò a la policìa capturarla.
Luego
de pasar por cuarteles,psiquiàtricos,reformatorios y de despacharse
a gusto enfermeras,
guardiacàrceles,psicòlogas,psiquiatras
y compañeras de reclusiòn,
Mariela
fuè entregada a las Fuerzas Armadas.
Durante
un tiempo,Mariela colaborò en la tarea de deshacerse de
cadàveres,los que eran abundantes.No se desdeño utilizarla,para su
placer,con personas vivas hasta que tambièn fuè subida a un
aviòn,con esposas y bozal,en companìa de otras prisioneras para
realizar,por ùnica y ùltima vez un vuelo sobre el Rio de la Plata.
Raùl
Cardillo para Los Verdugos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario